Libro diario de contabilidad: qué es, para qué sirve y cómo se hace

Libro diario de contabilidad

La gestión contable de una empresa no es una cuestión que se deba abordar de manera esporádica. Todo lo contrario: requiere una implicación del día a día para evitar posibles contratiempos a futuro. Ante tal realidad, no resulta extraño que el libro diario de contabilidad sea uno de los registros más relevantes en el entorno corporativo moderno. En especial en una época en la que su cumplimiento se resuelve fácilmente de forma digitalizada. ¿No sabes de qué te estamos hablando? Veamos en qué consiste, para qué sirve y cómo llevarlo a cabo sin errores. ¿Qué es el libro diario de contabilidad? Empecemos por el principio: el libro diario de contabilidad es un registro financiero en el que se van apuntando todas las operaciones de la compañía en orden. De ahí que también se le conozca como diario. De este modo, cualquier transacción comercial o financiera de la empresa se registra de forma consecutiva. La cual ha de determinar el debe o débito y el haber o crédito. Asimismo, se debe plasmar una breve descripción y los importes en cuestión. Este libro diario de contabilidad es de uso obligatorio, formando parte de la gestión financiera del negocio. Un documento que conviene delegar en manos de expertos, evitando cualquier error que, en una hipotética inspección, termine saliendo caro. Diferencias entre libro diario de contabilidad y libro mayor de contabilidad Resulta importante matizar que el libro diario de contabilidad y el libro mayor de contabilidad, por similares que puedan parecer, no son lo mismo. Mientras que en el libro diario se anotan las operaciones en orden cronológico, el libro mayor es más bien un registro organizativo sin importar el orden original. Son dos documentos diferentes que debes cumplimentar a partes iguales. ¿Para qué sirve el libro diario de contabilidad? Tener las cuentas claras en tu día a día te va a ser de gran utilidad para mantener en orden todo lo que sucede alrededor del marco financiero de tu empresa. Así que, más allá de ser un imperativo legal, se trata de un apoyo en la gestión económica. Puesto que todas las anotaciones se hacen cronológicamente, tendrás una visión clara y objetiva de tu evolución comercial. Lo cual implica un mayor control en pro de la eficiencia operativa. En términos administrativos, el libro diario de contabilidad es la base con la que vas a realizar el resto de los informes financieros y presentaciones ante Hacienda. Un registro histórico detallado que, bien sea por el cumplimiento normativo o por tu propio interés, debes realizar con total disciplina. ¿Cómo se hace el libro diario de contabilidad? Ahora que ya sabes qué es y cómo te va a ayudar, llega el momento de abordar una de las grandes incógnitas entre los empresarios: cómo poner a punto el libro diario de contabilidad. Si bien es cierto que el libro diario se ha realizado tradicionalmente de manera física, en la actualidad es mucho más sencillo cumplimentarlo con herramientas digitales. Sin embargo, bien elijas el formato impreso o el online, los apartados que debes cumplimentar y los pasos para hacerlo son iguales. ¡Veámoslos! Apartados del libro diario de contabilidad La estructura de un libro diario de contabilidad no tiene por qué ser fija en lo que respecta al orden. Pero sí debe incluir todos los apartados que enumeramos a continuación. De hecho, los programas de gestión digital incluyen todas estas casillas para que las rellenes cómodamente. Fecha. Para seguir el orden cronológico, la primera casilla es la de la fecha de la transacción. Un recurso clave para identificar los altibajos comerciales o los patrones de ganancias y gastos de tu empresa. Código y nombre de la cuenta. El código es el número de la cuenta a la que se vincula el sistema contable del negocio. A su lado, deberás indicar el nombre de la cuenta, adjudicando así la transacción a diferentes áreas concretas, como puede ser la de inventario, la de caja o, entre otras, la de cuentas por pagar. Debe y Haber. Todo libro contable diario debe tener una columna con el apartado “debe”, en el que se incluyen los aumentos en los activos o gastos, así como las disminuciones en los pasivos, ingresos o capital. Por su lado, el “haber” indicará lo opuesto: las disminuciones en activos y gastos o los aumentos en pasivos, ingresos y capital. Descripción. El último apartado es la descripción de la operación realizada, detallando de manera breve, pero clara, el origen o la motivación de la transacción. Pasos para hacer el libro diario de contabilidad Si tu diario de contabilidad es digital, simplemente tendrás que rellenar cada una de las casillas previamente mencionadas. El proceso es realmente eficiente y el margen de error resulta prácticamente nulo. No obstante, es importante que sigas ciertos patrones o pasos para agilizar estas anotaciones sin equivocarte. Nuestro consejo es que empieces siempre por la fecha y por la descripción. Acto seguido, selecciona las cuentas con su respectivo código y número. Terminando, por supuesto, con el registro de las cantidades de la operación. ¿Necesitas ayuda? Nos encargamos de gestionar tu contabilidad Por muy sencillo que pueda parecer, el registro del libro diario de contabilidad no deja de ser un elemento más en el enorme iceberg de la gestión financiera. Un tema más del que preocuparte en lo que respecta a tu negocio. Debido a ello, desde Lean Finance nos ponemos a tu entera disposición para llevar todas estas cuentas en tu nombre. Un trabajo rutinario que añadiremos al resto de la gestión contable de la empresa, incluyendo otras cuestiones como el libro mayor. Además, estamos especializados en el uso de programas de última generación. Unos softwares que puedes consultar estés donde estés para tener esta visión clara de tus estados económicos en tiempo real. Porque ya tienes bastante en tu cabeza como para que tener que estar anotando continuamente tus transacciones. ¿Quieres que nos convirtamos en tu apoyo en el día a día? Hablemos y empecemos a trabajar juntos.

Estrategias para aumentar los ingresos de un restaurante y tener más beneficio

Estrategias para aumentar los ingresos de un restaurante y tener más beneficio

Al igual que en cualquier modelo de negocio, el flujo de ingresos de un restaurante es una de las piedras angulares de su éxito corporativo. Incrementar las ganancias implica una mayor solvencia y, por ende, una mayor estabilidad. Sin embargo, una cosa es la teoría y otra bien diferente es la práctica. Motivo por el que en esta ocasión te traemos una serie de estrategias de gran efectividad para incrementar los ingresos de un restaurante. Todo ello, claro está, con el firme foco puesto en el aumento de los beneficios. Cómo aumentar los ingresos de un restaurante sin perder beneficios Lo primero que debes tener claro es que los ingresos de un restaurante son las ganancias que obtienes en tu día a día. En su defecto, para calcular los beneficios reales, debes descontar los gastos a la cifra anterior. Es evidente que sin un buen flujo de ingresos es imposible hablar de solvencia, mucho menos de rentabilidad. Sin embargo, esta diferenciación entre ganancias y beneficios debe ser el punto de partida a la hora de buscar nuevas estrategias que amplíen tu capital. De nada sirve hacer una inversión estratosférica que suponga más entrada de dinero si la salida económica es mayor. Por consiguiente, debes llevar a cabo un análisis sólido entre las ganancias y los costes antes de realizar cualquier acción en tu local. Razón por la que contar con un CFO especializado en el sector de la restauración resulta de gran ayuda. Acciones de interés para favorecer el flujo de ingresos de un restaurante Una vez establecido que no basta con aumentar el flujo de ingresos de un restaurante, sino que hay que mantener la atención en los beneficios, te traemos algunas estrategias que no requieren grandes despliegues de medios. Es decir: acciones con pocos gastos y muchas ganancias. De ti depende aplicar una de ellas, varias o todas. ¡La rentabilidad está servida! Ocupa todos los espacios del restaurante Si tienes varios espacios inactivos en el local, encontrar nuevos usos implica incrementar el flujo de ingresos notoriamente. Lo mejor de todo es que ya tienes estos huecos, así que la inversión será prácticamente nula. Los eventos privados son una muy buena opción. También las clases de cocina, impartiendo talleres en las horas de baja concurrencia. Incluso si dispones de un área con baja afluencia de clientes, puedes crear un coworking con servicio de café. No dejes un solo rincón sin utilizar. Aprovecha el poder del entorno online El entorno online es un lugar repleto de posibilidades para que tu negocio crezca. Más todavía en un sector tan estéticamente atractivo en las redes sociales como la hostelería. Diseña platos que, por su propia naturaleza, resulten atractivos. No es necesario que sean caros de elaborar: simplemente que tengan ese toque “chic” que te haga destacar en internet. Evidentemente, estas recetas se venderán más caras que el resto. Además, el servicio delivery también representa una gran oportunidad para mejorar el flujo de ingresos de un restaurante. Más allá de ofrecer tu carta por internet, puedes crear una marca paralela con una carta de bajo coste de producción. Véndela a través de las principales plataformas especializadas en la entrega a domicilio y amplía los márgenes sin que esto afecte a tu imagen empresarial. Suscripciones a tu restaurante Premiar a los clientes más fieles no solo optimiza su satisfacción, sino también puede ser un buen método para ampliar los beneficios. Las suscripciones mensuales a cambio de premios te otorgarán una cuota fija y, por lo tanto, más estabilidad empresarial. De igual modo, puedes optar por la gamificación de tus servicios. Incorpora dinámicas de juego como los retos del estilo “cada X comidas, la X+1 es gratis”. Los sorteos en redes sociales también son una muy buena estrategia. Experiencias culinarias únicas Las experiencias exclusivas están de moda y tu restaurante es un lugar idóneo para sacarles rédito económico. Menús de edición limitada, catas privadas, sesiones gastronómicas de otras regiones del país… Cualquier excusa es buena para captar a los clientes más exigentes. Todas estas acciones son perfectamente compatibles con tu presupuesto mensual; pero, sin duda, aumentarán el capital generado. Optimiza tu cadena de suministro No todas las estrategias para aumentar los beneficios están relacionadas con el incremento del flujo de ingresos: reducir los gastos es igual de válido. En este aspecto, abogar por optimizar la cadena de suministro mediante un abastecimiento de materias primas locales es muy efectivo. Adiós a los costes de transporte. Además, esto promueve una mejora en tu imagen de marca, demostrando un compromiso claro por la comunidad local. Forja aliados en tu localidad Siguiendo la línea anterior, te animamos a echar un vistazo a los negocios que hay en tu mismo barrio. Muchos de ellos pueden ser una gran oportunidad para aumentar las ganancias. Vender productos de otros comercios a cambio de una comisión u ofrecer descuentos en empresas externas son buenas formas de captar nuevos clientes sin aumentar los gastos. Tu red de aliados es determinante en tu fuerza comercial. Rodéate de quienes van a impulsar tu crecimiento: los competidores pueden ser compañeros. Esto amplía tu red de clientes y reduce costos operativos compartiendo recursos. Maximiza los ingresos de tu restaurante con nuestro equipo de CFO Ahora que ya tienes más claro cómo optimizar el flujo de ingresos de un restaurante, es el momento de que des un paso más allá y apuestes por mejorar tu gestión financiera. Las finanzas no son un tema que se pueda dejar al azar y en Lean Finance somos enteramente conscientes de ello. Por eso, si lo necesitas, pondremos a un CFO externo a trabajar para ti. Nuestro equipo de profesionales asumirá todas las gestiones relativas a tu contabilidad, tu tesorería y tus acciones estratégicas en el marco económico. Algo que, además, despejará tu agenda de dichas labores para que te centres en lo relativo a la gestión del local. Tu éxito será el nuestro. ¿Quieres empezar esta colaboración y ver cómo los ingresos de tu establecimiento crecen al ritmo en el que

Hacienda me pide facturas de hace 20 años: cómo actuar y qué soluciones hay

Hacienda me pide facturas de hace 20 años

La gestión fiscal representa uno de los principales quebraderos de cabeza para las empresas. En cualquier momento, la Agencia Tributaria puede llamar a la puerta y, si lo hace, resulta fundamental estar preparado para recibirla como es debido. En este sentido, hay una situación que cada vez más compañías temen sufrir: “Hacienda me pide facturas de hace 20 años”. Dos décadas atrás y aún así, las cosas pueden salir muy caras a quien no tiene una sólida estrategia fiscal. Veamos en qué contextos se puede producir esta situación, qué hacer y cómo evitar males mayores en un futuro. ¿Hacienda me puede pedir facturas de hace 20 años? “Hacienda me pide facturas de hace 20 años; pero, ¿acaso puede hacerlo?”: esta es una situación poco común y, sin embargo, supone un verdadero motivo de estrés para muchos empresarios. Incluso el mero temor de que se produzca es más que suficiente como para preocuparse. Es importante señalar que la obligación de conservar las facturas es, por carácter general, de 4 años. Se trata del plazo de prescripción de los impuestos ante Hacienda. No obstante, hay ciertas excepciones y conocerlas es el primer paso para prevenir contratiempos con las autoridades estatales. Aquí tienes un desglose de quién te puede pedir qué en cada caso: Hacienda. Insistimos: el plazo de Hacienda para hacer inspecciones es de 4 años, siendo este el plazo más popular. Sin embargo, frente a las irregularidades graves, esta cifra puede aumentar considerablemente. Además, si tienes facturas de bienes inmuebles, debes conservar el IVA durante 9 años. Código de Comercio. Según la legislación mercantil, el periodo de conservación de las facturas se amplía hasta los 6 años. Código Penal y Ley de Prevención de Blanqueo de Capitales. En estos casos, asociados a las irregularidades más graves como el delito por fraude fiscal, debes tener las facturas de hace 10 años para demostrar tu inocencia. Como puedes observar, los 4 años que todo el mundo conoce son insuficientes como para salir indemnes ante cualquier situación. Por eso, lo más recomendable es almacenar en un lugar seguro tus facturas emitidas y recibidas. Con la llegada del Sistema Verifactu, esto dejará de ser un problema. Los softwares autorizados por Hacienda almacenan la información fiscal en un espacio seguro y accesible. No obstante, es muy probable que tengas grandes ficheros con facturas y es fundamental que los conserves en buenas condiciones. ¿Qué ocurre si no se presentan las facturas? Es poco probable que Hacienda te pida facturas de hace 20 años; pero, si lo hace, es fundamental darles las respuestas que buscan. Si no lo haces, puedes sufrir sanciones considerables que pongan en jaque tu integridad financiera como negocio. Una serie de multas que desglosamos a continuación, evidenciando así lo importante que es satisfacer las peticiones de la Agencia Tributaria: Multas comunes. Cada documento no aportado en tiempo y forma supondrá una multa de 200€. Además, tendrás un recargo del 2% de la cifra del último ejercicio en caso de que los datos no aportados sean relevantes, sufriendo una infracción mínima de 10.000€. Resistencia y negativa. Si obstruyes los procesos de Hacienda o si te niegas a aportar las facturas, la multa ascenderá a los 1.000€ por cada requerimiento. Las sanciones son notoriamente elevadas; por lo que, si te piden facturas del pasado, lo más apropiado es que se las brindes con la máxima diligencia. Momento en el que delegar esta tarea en asesorías especializadas resulta la mejor solución posible. Qué debes hacer si Hacienda te pide facturas de hace 20 años “Hacienda me pide facturas de hace 20 años, ¿qué puedo hacer?”, llegamos así al centro de la cuestión para determinar cuáles son los pasos apropiados en estas situaciones. Lo primero que debes hacer es confirmar la legitimidad de la notificación, comprobando que provenga de Hacienda y no de terceros. Para ello, puedes contactar con la Agencia Tributaria para comprobar si es así o no. En caso de que la comunicación sea correcta, toca ponerse en marcha y buscar las facturas correspondientes. Echa mano de tus archivadores y busca uno por uno las facturas que conservaste en el pasado. En este punto, toca ser organizado y clasificar cada documento según su fecha, tipo de gasto o ingreso y demás factores que consideres importantes. Ahora bien, ¿qué sucede si alguno de los documentos requeridos no aparece? Este problema se resuelve, en primer término, escribiendo un comunicado a Hacienda, explicando la situación y los motivos por los que has perdido la factura. Si las autoridades fiscales consideran dichos ingresos o gastos como pruebas clave en las inspecciones, lo más probable es que se produzca la sanción correspondiente. Para evitar que esto suceda, antes de enviar el escrito a Hacienda, ponte en contacto con tus proveedores o clientes. Es posible que ellos tengan copias que te permitan presentar documentos sustitutivos y así justificar las operaciones que hiciste años atrás. Cómo prevenir problemas con tus facturas en un futuro: pásate a una asesoría digitalizada La clave para evitar contratiempos con Hacienda es la prevención. Es decir, mantener una sólida gestión fiscal que te permita mostrar a las autoridades tu compromiso con la transparencia. Ya hemos visto que el extravío de facturas no es excusa para no presentarlas; tampoco lo es el desconocimiento sobre las regulaciones tributarias. Ante tal realidad, lo más apropiado es delegar funciones en las mejores asesorías. Es más, hacerlo en una asesoría digitalizada implica tener a salvo todos tus gastos e ingresos ante posibles inspecciones futuras gracias a los nuevos softwares especializados. Si Hacienda te pide tus facturas, las podrás enviar sin quebraderos de cabeza de por medio. Todo ello simplificando en gran medida la gestión de tus impuestos tanto trimestrales como anuales. Es en este punto en el que entramos en juego desde Lean Finance. Somos el equipo que necesitas para actualizar tu fiscalidad con los programas más modernos y dejar de lado los desencuentros con Hacienda. ¿Quieres que la estabilidad forme parte de tu negocio? Hablemos: somos expertos en la gestión fiscal

7 Estrategias para aumentar la rentabilidad de proyectos

Rentabilidad de proyectos

Una cosa está clara. Y es que un proyecto que no es rentable está abocado al fracaso. Por ello, quienes están al frente de uno, siempre trabajan en pro de este indicador. Es más, no importa si estás al frente de una gran organización o lideras un pequeño equipo, lograr que cada proyecto sea rentable es esencial para mantener la sostenibilidad y el crecimiento. Ahora bien, esta tarea puede ser más compleja de lo que parece. Así que, ¿qué te parece si vemos algunas de las estrategias más efectivas para aumentar la rentabilidad de proyectos? ¿Qué significa la rentabilidad de un proyecto? Como siempre, empezando la casa por los cimientos, lo ideal es aclarar qué se entiende por rentabilidad de proyectos. En este sentido, podemos decir que la rentabilidad de un proyecto es un indicador que mide si este generará beneficios económicos o pérdidas. Así, para calcularla, se deben restar todos los costes directos e indirectos de los ingresos totales. Esto incluye materiales, mano de obra, gastos operativos y cualquier otro coste asociado al proyecto. Factores que afectan la rentabilidad de proyectos Como podrás imaginar la rentabilidad de proyectos está sujeta a diferentes factores que le afectan directamente. En este contexto, es importante hacer hincapié en conocerlos antes de implementar estrategias para mejorar este indicador. Dicho esto, algunos de los que más impacto pueden tener son: Definición de objetivos y alcance. Si las metas de un proyecto no se han definido correctamente, podemos caer en sobrecostes y retrasos. Control de costes. Cuando no hay un presupuesto bien definido, se pueden desviar recursos de manera innecesaria. Gestión del flujo de caja. En el caso de flujos de caja inestables, se podría poner en riesgo la continuidad de cualquier proyecto. Asignación de recursos. En casos de un mal uso de los recursos, ya sea por infrautilización o sobrecarga, nos encontramos con una menor eficiencia de los mismos. Plazos incumplidos. Este aspecto es uno de los que más afecta a la rentabilidad de proyectos. Y es que cada día adicional en un proyecto representa un coste que puede reducir el margen de beneficio. Riesgos no previstos. Por último, los imprevistos, si no se gestionan, pueden consumir gran parte del presupuesto. Estrategias para aumentar la rentabilidad de los proyectos Ahora sí, hemos llegado a la parte más interesante de todas: cómo aumentar la rentabilidad de proyectos. Y para ello, vamos a describir una serie de estrategias que puedes aplicar desde hoy para garantizar que tus proyectos vayan como la seda y generen grandes beneficios. Definir objetivos claros y alcanzables Como decíamos antes, un proyecto con metas bien definidas tiene más probabilidades de éxito. Así que, algunas de las primeras medidas para que puedas aumentar la rentabilidad de proyectos son: Establece objetivos SMART. Es decir, objetivos específicos, medibles, alcanzables, relevantes y temporales. Por ejemplo, en lugar de plantear ‘mejorar las ventas’, propón ‘incrementar los ingresos un 15% en seis meses’. Identifica los indicadores clave de rendimiento (KPIs) que reflejen el progreso y la rentabilidad. Por ejemplo: desviación del presupuesto, tiempo de entrega y satisfacción del cliente. Y comunica los objetivos a todas las partes interesadas para asegurar el alineamiento y evitar malentendidos. Realizar un análisis de rentabilidad de proyectos Otro punto importante para llevar a cabo un buen análisis de rentabilidad de proyectos es, la evaluación previa. Esto implica que, antes de comprometer recursos, evalúes si el proyecto será económicamente viable. ¿Cómo? Calcula el índice de rentabilidad (IP). Relaciona el valor actual de los flujos de caja futuros con la inversión inicial. Si el IP es mayor a 1, el proyecto tiene buen potencial de beneficios. Analiza escenarios de riesgo y prepara planes de contingencia para los posibles imprevistos. Incluye todos los costes ocultos, como mantenimiento o gastos administrativos, para obtener una visión realista. Controlar los costes de forma proactiva Además de lo anterior, conviene hacer hincapié en que un control riguroso de los costes es fundamental para maximizar el margen de beneficio. Y esto se puede lograr con prácticas que incluyen: Presupuestos realistas. Estima los gastos con detalle, reservando un porcentaje para imprevistos (entre el 5% y 10% del total). Seguimiento continuo. Revisa los costes en intervalos regulares y ajusta donde sea necesario. Negociación con proveedores. Establece acuerdos a largo plazo para obtener mejores precios. Optimizar la asignación de recursos En la sección anterior comentamos que hacer un buen uso de los recursos humanos y materiales tiene un gran impacto en la rentabilidad de proyectos. Por ello, es otra de las medidas que puedes plantear a la hora de mejorar este aspecto. En este sentido, te recomendamos: Asignar tareas según las competencias del equipo. Asegúrate de que cada persona trabaje en áreas donde aporte más valor. Evitar el agotamiento. Equilibra la carga de trabajo para evitar el desgaste del equipo, ya que esto puede afectar la calidad y los tiempos de entrega. Monitorear constantemente. Utiliza herramientas para identificar recursos infrautilizados o sobrecargados y realiza los ajustes necesarios. Cumplir con los plazos Llegados a este punto, no podemos olvidar del peso que tienen los plazos en la rentabilidad de proyectos. Y no es para menos: cada retraso representa costes adicionales y puede impactar en la confianza de las partes interesadas. Para evitarlo: Utiliza herramientas de gestión de proyectos. Hoy en día existen diferentes softwares que te permiten seguir el progreso y detectar posibles retrasos. Realiza reuniones periódicas. Evalúa el estado del proyecto y ajusta los cronogramas según sea necesario. Aplica metodologías ágiles. Estas fomentan entregas parciales y continuas, mejorando la eficiencia general. Fomentar la comunicación efectiva Dicen por ahí que hablando se entiende la gente. Y en lo que respecta a la rentabilidad de proyectos, una comunicación fluida entre todas las partes interesadas reduce errores y mejora los resultados. ¿Qué puedes hacer? Informes regulares. Comparte actualizaciones sobre el estado del proyecto, los hitos alcanzados y los desafíos. Reuniones transparentes. Habla abiertamente sobre los riesgos y busca soluciones colaborativas. Feedback constante. Escucha las opiniones del equipo y los clientes para realizar mejoras en tiempo real.

Qué son, para qué sirven y ejemplos de provisiones contables

Ejemplos de provisiones contables

Ojo a este tema: a menudo, se habla de ingresos y gastos, pero ¿qué sucede con esos compromisos futuros que, aunque no han ocurrido aún, son prácticamente seguros? ¿Cómo influyen en la contabilidad de una empresa? Para explicar esta situación, es necesario recurrir a las provisiones contables. Una herramienta que permite a las empresas anticiparse a los riesgos financieros futuros y reflejar de manera realista sus compromisos económicos. ¿Quieres saber más? Descubre qué son, para qué sirven y algunos ejemplos prácticos que ayudan a entender mejor este concepto. ¿Qué son las provisiones contables? Aunque más adelante veremos ejemplos de provisiones contables que aclararán el concepto, empecemos por abordar su definición. En términos generales las provisiones contables son un registro anticipado de un gasto o una pérdida estimada que, aunque aún no se ha materializado, se considera probable en el futuro. Más fácil: representan una obligación actual de la empresa derivada de eventos pasados, y que finalmente terminará en una salida de dinero. Este concepto se basa en el principio de prudencia contable, que establece que es mejor anticiparse y registrar posibles pérdidas antes que sobrevalorar los beneficios de una empresa. De este modo, las provisiones ayudan a las organizaciones a reflejar una imagen fiel de su situación financiera. Pero, ¿en qué se diferencian de un gasto? Aunque las provisiones y los gastos parecen similares, existe una diferencia clave: los gastos corresponden a hechos ya ocurridos, mientras que las provisiones son estimaciones de gastos futuros que aún no se han materializado. Por ejemplo, si una empresa debe reparar maquinaria en el próximo año, registrará una provisión hoy para reflejar ese posible coste futuro. ¿Para qué sirven las provisiones contables? Con la definición clara, podemos decir que las provisiones son una herramienta de gestión financiera estratégica. Y es que al anticipar y contabilizar los riesgos financieros futuros, las empresas pueden prepararse mejor para afrontar imprevistos. Entonces, ¿para qué sirven? Anticipar gastos futuros. Las provisiones permiten registrar de forma anticipada gastos que, aunque aún no se han producido, tienen una alta probabilidad de ocurrir. Esto incluye indemnizaciones, multas legales, reparaciones, entre otros. Cumplir con las normativas contables. Normas como las NIIF (Normas Internacionales de Información Financiera) o el Plan General de Contabilidad en España exigen que las provisiones se registren para garantizar la transparencia en los estados financieros. Gestionar riesgos. Las provisiones actúan como un colchón financiero ante contingencias que podrían afectar negativamente la estabilidad económica de una empresa. Facilitar la planificación financiera. Al incluir las provisiones en las proyecciones financieras, las empresas pueden tomar decisiones más informadas y realistas sobre su estrategia de inversión y asignación de recursos. Mantener la confianza de los stakeholders. Inversores, acreedores y otros interesados valoran la prudencia financiera. Registrar las provisiones adecuadamente demuestra una gestión responsable. Ejemplos de provisiones contables más comunes Ahora sí, podemos mencionar algunos ejemplos de provisiones contables que pueden ayudarnos a entender mejor este concepto. Eso sí, antes también veremos los tipos más habituales. Presta atención y analiza cómo aplicar cada uno de ellos en tu empresa. Provisión para cuentas incobrables De entre todos los ejemplos de provisiones contables que veremos, este cubre las pérdidas esperadas por clientes que no pagarán sus deudas. Ejemplo: si una empresa tiene un cliente con una deuda de 10.000 € y estima que solo podrá recuperar la mitad, creará una provisión por los 5.000 € restantes. Provisión para litigios Otro de los ejemplos de provisiones contables dice que si una empresa enfrenta una demanda legal y se estima que podría perder el caso, deberá crear una provisión para reflejar los costes asociados, como indemnizaciones o gastos legales. Ejemplo: una compañía enfrenta una reclamación judicial y sus abogados estiman que podría costar 20.000 €. Aunque el juicio aún no ha terminado, se registra una provisión por ese importe. Provisión para garantías Este tipo es de los más comunes y se basa en que las empresas que ofrecen productos con garantía, deben prever los costes de reparación o reemplazo que sus clientes puedan solicitar. Ejemplo: Una tienda de electrodomésticos vende 1.000 lavadoras con una garantía de dos años. Basándose en datos históricos, estima que el 5% de los productos necesitarán reparación, con un coste medio de 100 € por unidad. La provisión será de 5.000 €. Provisión para reestructuraciones Otra posible situación relacionada con este concepto es que cuando una empresa planifica cambios estructurales importantes, como cierres de plantas o despidos masivos, debe registrar una provisión para los costes asociados. Ejemplo: Una empresa decide cerrar una de sus fábricas. Calcula que las indemnizaciones por despido ascenderán a 200.000 €. Este importe se registra como una provisión en el momento en que se toma la decisión. Provisión para impuestos Este es otro de los ejemplos de provisiones contables y se utiliza para registrar impuestos futuros que la empresa tendrá que pagar, como inspecciones fiscales pendientes o impuestos sobre beneficios. Ejemplo: Una empresa sabe que deberá pagar 15.000 € de impuestos en el próximo ejercicio. Aunque el cálculo final aún no está disponible, se registra una provisión por ese importe. Provisión para depreciación de activos Otro caso relacionado se da cuando los activos de una empresa, como maquinaria o vehículos, pierden valor con el tiempo. Ante ello, se crea una provisión para reflejar esta depreciación. Ejemplo: Una empresa adquiere maquinaria por 50.000 € con una vida útil estimada de 10 años. Cada año, registra una provisión de 5.000 € por depreciación. Provisión para beneficios a empleados Algunas empresas ofrecen beneficios a largo plazo, como pensiones o indemnizaciones por despido. Este tipo de costes también deben registrarse como provisiones contables de forma adecuada. Ejemplo: Una empresa promete pagar pensiones a sus empleados una vez jubilados. Se calcula que el coste total será de 500.000 €, y se distribuye en provisiones anuales durante el tiempo que los empleados trabajen en la empresa. Te ayudamos con la contabilidad de tu empresa Es un hecho: las provisiones contables son una pieza clave para la gestión financiera de las empresas. Permiten cumplir con las normativas

CFO externo: Consigue aumentar los beneficios de tu empresa

Director financiero externo

Cuando vemos en las noticias o en el periódico titulares como: “Sólo el 10% de las startups sobrevive los dos primeros años”, lo primero que pensamos es que no han sabido adaptarse a las necesidades del mercado, que ha fallado la captación de clientes, la organización o que los socios no han sabido remar en la misma dirección. Por ningún lado aparece el concepto CFO externo. Casi nunca se habla de aspectos financieros. Siendo esta una de las áreas que más influyen en la capacidad de supervivencia de una startup. Si no quieres ser una de esas empresas que conforman el 90% de las startups que fracasan, ponte en manos de un CFO externo. A continuación, comentaremos qué puede hacer por tu negocio y por qué es tan importante contar con sus conocimientos y experiencia. ¡Empecemos! Cuál es el papel que desempeña un CFO externo Como decíamos, el área financiera es una de las más importantes dentro de una empresa y de las que requiere especial atención y cuidado. Sin embargo, muchas veces no se cuenta con personal cualificado para asumir estas responsabilidades. Es más, tampoco compensa contratar a alguien, dado el escaso volumen de trabajo. Por ello, se recomienda contratar a un CFO externo. Su principal función es garantizar la liquidez y supervivencia del negocio. El papel que ocupa es algo similar a lo que sería la primera pieza de un efecto dominó. Si cae, o está mal colocada, daría lugar al derrumbe de todas las demás. Por eso, lejos de lo que se pueda llegar a pensar, el principal motor de un negocio no siempre son sus clientes. Si hay clientes, pero los recursos que se generan no están bien gestionados, toda la compañía cae. Una buena gestión económica siempre va a favorecer la implementación de estrategias de captación y fidelización de clientes. Por qué es tan importante para las startups Veamos ahora de forma más detallada cuáles son las ventajas o beneficios de tener un CFO externo dentro de una startup. Te adelantamos que, si quieres que tu empresa crezca y llegue a convertirse en un referente dentro de tu sector, vas a necesitar contratar a uno. Sin una buena base financiera, no es posible construir unos cimientos estables y rígidos que soporten el peso del negocio. Dicho esto, estas son sus ventajas: Información financiera precisa y fiable Sin una información clara, la empresa no podrá crecer ni sobrevivir. Lo ideal es conocer de primera mano cualquier detalle económico financiero de la misma. Principalmente, los ingresos y gastos. Así te aseguras de hacer un uso correcto de todos los recursos disponibles. En caso contrario, podría darse la situación de que la empresa gaste más dinero del que entra. O que se estén desaprovechando materiales, tiempo o dinero en asuntos innecesarios. La optimización del gasto también es un aspecto a trabajar por el CFO externo. Este debe garantizar que no se gasta dinero de más y que se maximizan los beneficios. Anticipación Cuando se tiene información fiable y a tiempo, es posible prevenir incidentes importantes. Por ejemplo, cuando vamos de viaje, Google Maps suele decirnos si hay atascos en las carreteras por las que tenemos previsto circular. Esta información nos ayuda a tomar medidas preventivas y cambiar el itinerario para evitar largas horas en un atasco. Del mismo modo, si el análisis económico financiero de la startup predice que dentro de unos meses es posible entrar en pérdidas, es necesario tomar las medidas oportunas para prevenir dicha situación y buscar el éxito de la empresa. Normalmente el CFO de una startup hace previsiones para informar a los socios de posibles inconvenientes y sugiere propuestas que les ayuden a mejorar. Pleno conocimiento de la realidad Gracias al buen hacer de un CFO externo, todos los socios de la startup pueden saber a tiempo real cuál es el estado de las finanzas de la misma. Y, al hilo del punto anterior, tomar medidas que se acerquen a los objetivos que desean alcanzar. De otro modo, sería ir a ciegas y desalineados con la realidad del negocio. Antes de realizar una inversión importante o dar un paso relevante para la startup, lo ideal es consultarlo con el CFO para no comprometer la estabilidad de la misma. Plan financiero a medida El plan financiero de una startup se podría decir que es el documento que contiene el camino a seguir para lograr las metas que esta se proponga. Como tal, debe ser totalmente personalizado. Pues cada empresa tiene un punto de partida, unas metas y unos recursos para alcanzarlas diferentes. Es responsabilidad del CFO externo preparar este plan y diseñar el mejor plan posible para lograr la rentabilidad. Control, análisis y seguimiento Otro de los beneficios más notables de contar con una CFO externo es que tendrás a tu disposición un personal altamente cualificado llevando a cabo un riguroso control, análisis y seguimiento del estado económico financiero. Este incluye aspectos como el análisis de balances o la gestión de la tesorería. Lo importante es que alguien experto se ocupe de estos temas, sin que tú tengas que preocuparte por ellos. De este modo, podrás dedicar tu tiempo a actividades de desarrollo y crecimiento alineadas con tu zona de genialidad. Y donde seguro eres más productivo. Buena política de inversión A veces, lo que a simple vista puede parecer una buena oportunidad de inversión, no lo es. Y por ello, es conveniente llevar a cabo un trabajo de inspección para comprobar si puede ocasionar beneficio o perjuicio para la empresa. El CFO externo es quien tiene las herramientas adecuadas para dar una respuesta acertada. Por ello, no es aconsejable tomar una decisión apresurada y sin contar con el asesoramiento de expertos. Mejor toma de decisiones Por último, todo lo anterior se podría resumir en una única razón de peso. Y es que contratar a un CFO externo, al fin y al cabo, te ayudará a tomar mejores decisiones para tu negocio. Con toda la información necesaria y el asesoramiento de un experto

Cómo calcular y controlar el margen de beneficio de tu restaurante para mantenerlo saludable

Margen de beneficio

Si tienes un restaurante, esta pregunta estará rondando por tu cabeza seguro: ¿cuál será mi margen de beneficio este mes? Y es que seamos sinceros, este tema es algo que preocupa, y mucho. ¿Imaginas qué ocurriría si la respuesta fuera negativa? Para evitar llegar a esa situación, a continuación, explicaremos cómo calcular el margen de beneficio y qué puedes hacer desde hoy mismo para entenderlo, controlarlo y que juegue a tu favor. ¿Estás listo? Este indicador financiero es crucial para medir la salud de tu establecimiento y tomar decisiones estratégicas que impulsen su crecimiento. Veamos qué es y qué estrategias puedes aplicar para mantenerlo saludable. ¿Qué es el margen de beneficio? Antes de nada, empecemos por lo más básico: la definición de margen de beneficio. De manera general, podemos decir que se trata de un indicador financiero que mide la rentabilidad de un negocio. En este caso, de un restaurante. Dicho en otras palabras: muestra cuánto dinero gana tu restaurante por cada euro que ingresas. Ahora bien, es importante que sepas que existen dos tipos principales de margen de beneficio: Margen de beneficio bruto. Se centra en la rentabilidad de los productos o platos después de descontar los costes directos (como ingredientes o materias primas). Margen de beneficio neto. Mide la rentabilidad total del negocio después de descontar todos los gastos, incluidos los costes directos e indirectos (alquiler, suministros, salarios, etc.). En cualquier caso, ambos son fundamentales para entender el desempeño financiero de tu restaurante y tomar decisiones informadas. ¿Cómo se calcula el margen de beneficio? Una vez que ha quedado claro el concepto, toca entrar en temas más complejos como el cálculo del margen de beneficio. ¿Tienes una calculadora cerca? ¡Veamos cómo se hace! Aquí te mostramos las fórmulas para los dos tipos: Margen de beneficio bruto La fórmula es: [(Ventas – Costos directos) / Ventas] x 100 = Margen de beneficio bruto Pongamos un ejemplo: Precio de venta de un plato: 15 € Costos de los ingredientes: 6 € Cálculo: [(15 – 6) / 15] x 100 = 60% de margen de beneficio bruto Este porcentaje indica que un 60% del precio de ese plato es ganancia bruta. Si este margen es bajo, deberías considerar ajustes como optimizar los ingredientes o revisar el precio de venta. Margen de beneficio neto La fórmula es: [(Ingresos totales – Costos totales) / Ingresos totales] x 100 = Margen de beneficio neto Veamos un ejemplo, suponiendo que tienes: Ingresos totales mensuales: 100.000 € Costes totales (directos e indirectos): 90.000 € Cálculo: [(100.000 – 90.000) / 100.000] x 100 = 10% de margen de beneficio neto Un margen neto del 10% es aceptable para muchos restaurantes, aunque dependerá del tipo de establecimiento. ¿Por qué es importante calcular y controlar el margen de beneficio? Aunque esta pregunta parece evidente, es importante que sepas por qué debes controlar este indicador en tu restaurante. Y es que entender y gestionar el margen de beneficio te permitirá: Tomar decisiones informadas. Como ajustar precios, optimizar costes o rediseñar el menú. Identificar áreas de mejora. Hablamos, por ejemplo, de detectar platos o servicios que no son rentables. Garantizar la sostenibilidad del negocio. Recuerda que un margen saludable asegura que puedes cubrir gastos y reinvertir en el crecimiento de tu restaurante. Estrategias para mantener un margen de beneficio saludable Si después de calcular el margen de beneficio, te preocupa cómo pueda variar, es fundamental ponerse manos a la obra e implementar estrategias que te ayuden a mantenerlo en un rango óptimo. Por cierto, aquí te dejamos un enlace para que conozcas los márgenes de beneficio medios por tipo de restaurante. Estas estrategias son, entre otras: Controla los costes de alimentos Uno de los costes más importantes de un restaurante es, lógicamente, el de los alimentos con los que se elaboran los platos. Y aquí no hablamos de mermar la calidad de los mismos, sino de hacer un uso responsable. Para ello, puedes: Realizar escandallos. Detallar los ingredientes y el coste exacto de cada plato para fijar precios adecuados. Optimizar el inventario. Implementar sistemas de control para evitar desperdicios y sobrecompras. Negociar con proveedores. Buscar descuentos por compras al por mayor o cambiar a ingredientes de temporada más económicos. Optimiza los gastos operativos Además de los alimentos, para que el restaurante funcione, es fundamental contar con personal, tener electricidad y realizar acciones promocionales. Lo que ocurre es que todo eso también tiene un coste. ¿Qué podemos hacer al respecto para mantener el margen de beneficio? Personal. Usa herramientas digitales para planificar turnos en función de la demanda y evitar exceso de personal en horas valle. Energía. Invierte en equipos eficientes y practica medidas de ahorro como apagar luces o maquinaria innecesaria. Marketing. Evalúa el retorno de inversión de tus estrategias publicitarias y prioriza los canales que te sean más rentables. Ajusta el precio de los platos Esta parte puede ser la más delicada, sobre todo por la reacción de los clientes habituales. Sin embargo, es esencial para mantener un margen saludable. Aquí tienes unos trucos para hacerlo de la mejor forma posible: Usa la ingeniería de menú. Destaca platos de mayor rentabilidad en la carta con diseños atractivos. Crea promociones estratégicas. Por ejemplo, menús del día en horarios de baja demanda o combos que incrementen el ticket promedio. Aumenta la productividad del personal Las personas que trabajan en tu restaurante también pueden ayudarte a aumentar el margen de beneficio a través de su trabajo. Pueden ser piezas clave en todo esto si aplicas estrategias como: Formación. Enseña a los camareros técnicas de venta sugestiva para aumentar el ticket promedio. Bonificaciones. Establece incentivos por alcanzar objetivos de ventas o reducir desperdicios. Monitorea constantemente tus métricas financieras Recuerda esto: lo que no se mide no se mejora. Así que, si no lo haces aún, te recomendamos que lleves un control preciso de ciertas métricas financieras en tu restaurante. Puedes usar herramientas como: TPV. Para registrar y analizar las ventas. Software de gestión. Para que te ayude a controlar inventarios, costes y productividad

Qué es y para qué sirve una consultoría fiscal

Consultoría fiscal

Si tienes una empresa, sabrás que el ámbito fiscal suele ser complejo, más aún si no eres especialista en estos temas (o no tienes a uno en tu equipo). Es por ello, que la mayoría de organizaciones recurren a la consultoría fiscal como medida de prevención para no tener problemas con el fisco. Y es que una consultoría fiscal es un servicio esencial para garantizar el cumplimiento normativo, optimizar los recursos y evitar posibles sanciones por parte de la administración tributaria. ¿Quieres saber más? A continuación, explicaremos con todo lujo de detalles qué es una consultoría fiscal y qué impacto puede llegar a tener en la empresa. Consultoría fiscal ¿en qué consiste? En primer lugar, debemos decir que una consultoría fiscal es un servicio especializado que asesora a empresas en la planificación, cumplimiento y optimización de sus obligaciones fiscales. El objetivo principal es garantizar que el negocio se mantenga dentro del marco legal vigente, al mismo tiempo que se identifican oportunidades para reducir la carga impositiva de manera lícita. Dicho esto, un consultor fiscal debe ser experto en normativas tributarias locales e internacionales. Solo así, podrá realizar funciones como la presentación de declaraciones o dar asesoramiento estratégico. Qué impacto tiene la consultoría fiscal en la empresa ¿para qué sirve? Visto el objetivo que persigue la consultoría fiscal, es fácil entender por qué las empresas recurren a ella. No obstante, en los siguientes párrafos detallaremos el impacto real que estos profesionales tienen en el funcionamiento y la rentabilidad de un negocio. Como veremos ahora, la consultoría fiscal no solo se encarga de cumplir con las obligaciones tributarias, sino que también actúa como un socio estratégico que ayuda a las empresas a tomar decisiones más informadas y a optimizar sus recursos financieros. Asesoramiento personalizado Es importante hacer hincapié en que cada empresa tiene una situación fiscal única, por lo que no hay una solución estándar a los problemas que puedan aparecer. Aquí es donde entra el servicio de consultoría fiscal, este  proporciona un asesoramiento adaptado a las necesidades específicas de cada empresa. Así, los consultores analizan en profundidad la estructura financiera del negocio y ofrecen soluciones eficaces para optimizar su carga impositiva. Todo esto se traduce en mejores decisiones que terminan en un ahorro significativo y una mayor eficiencia en la gestión de recursos. Cumplimiento normativo La legislación fiscal está en constante cambio, y mantenerse al día con las normativas vigentes puede ser algo complejo. En este sentido, la consultoría fiscal garantiza que todas las obligaciones tributarias se cumplan en tiempo y forma, evitando posibles sanciones o recargos. Con ello, se reduce el riesgo de penalizaciones y se fomenta la relación transparente con la administración tributaria. Análisis de riesgos fiscales El análisis de riesgos fiscales es un proceso clave dentro de la consultoría fiscal que permite a las empresas identificar, evaluar y gestionar posibles contingencias tributarias que podrían afectar su estabilidad financiera y operativa. Su objetivo principal es detectar áreas de incumplimiento o vulnerabilidades dentro de la gestión fiscal de la empresa. Con ello se consigue minimizar la posibilidad de sanciones, multas o litigios con la Administración Tributaria. Planificación fiscal estratégica Además de lo anterior, la consultoría fiscal sirve para ayudar a las empresas a diseñar estrategias fiscales a largo plazo. Es decir, para identificar oportunidades que optimicen la carga impositiva y mejorar la rentabilidad del negocio. De este modo, se logra maximizar los recursos financieros disponibles y prepararse ante posibles contingencias fiscales. Representación ante la administración Como sabrás, las empresas pueden enfrentarse a inspecciones fiscales, requerimientos o litigios con la Agencia Tributaria. Si esto ocurre, un consultor fiscal puede actuar como representante ante las autoridades, gestionando la documentación y defendiendo los intereses de la empresa. Así, esta tendrá mayor tranquilidad y un respaldo profesional en situaciones legales complejas. Automatización y digitalización fiscal Hoy en día, algunas consultorías fiscales, como la de Lean Finance, empleamos herramientas tecnológicas avanzadas para automatizar procesos fiscales, como la gestión de impuestos, la generación de informes y la presentación de declaraciones de forma telemática. Esto supone una gran ventaja, pues hablamos de ahorro de tiempo y reducción de errores en la gestión fiscal. Cómo elegir un buen servicio de consultoría fiscal Como has podido comprobar, contar con un servicio de consultoría fiscal es algo que puede beneficiar enormemente a tu empresa. La siguiente pregunta sería, ¿cómo elegir uno que realmente aporte todos los beneficios anteriores? Nuestra recomendación es que tengas en cuenta estos aspectos: Experiencia y especialización. Asegúrate de que la consultoría tenga experiencia en tu sector empresarial y un equipo de profesionales especializados en normativa fiscal. Servicios integrales. Una buena consultoría debe ofrecer un abanico de servicios que incluya desde la gestión contable hasta la representación legal ante Hacienda. Digitalización y tecnología. Opta por consultorías que cuenten con herramientas digitales para una gestión eficiente y en tiempo real. Atención personalizada. Un buen consultor fiscal debe estar disponible para resolver tus dudas y proporcionarte un servicio adaptado a tus necesidades. ¿Necesitas una consultoría fiscal? Si sientes que tu empresa necesita mejorar su gestión fiscal, reducir su carga impositiva o simplemente asegurarte de que estás cumpliendo con todas las obligaciones legales, considera un cambio de consultoría fiscal. Este tipo de servicios te permitirá tomar decisiones más informadas y evitar problemas fiscales a futuro. Invierte en un servicio profesional y garantiza la tranquilidad de tu negocio. ¿Hablamos? Ponte en contacto con nosotros y te informaremos sobre cómo llevamos a cabo este tipo de servicios.

Forecasting: riesgos y beneficios para las startups

Forecasting

La incertidumbre es uno de los mayores motivos de estrés entre los emprendedores. Es el hecho de no saber qué va a ocurrir ni cómo va a ser su futuro, temiendo en todo momento perder la viabilidad corporativa que se está construyendo. Debido a ello, realizar previsiones y estimaciones de manera regular es muy habitual en una startup. Lo cual nos lleva directamente a hablar del forecasting. Veamos en detalle qué es el forecasting y qué ventajas o riesgos plantea en cada caso. Forecasting: qué es y para qué sirve El forecasting es una estimación de la demanda que se va a tener dentro de la startup sobre los productos o los servicios que ofrece. Un análisis sobre los patrones de los mercados y de los consumidores que permite anticipar los eventos venideros. Para ello, se emplean datos históricos sobre ventas pasadas, estimaciones de marketing e información general del mercado, incluyendo las nuevas tecnologías. Así pues, nos encontramos ante un concepto muy ligado a la proyección financiera que merece la pena tener en cuenta de cara a actuar con conocimiento de causa. En este orden de ideas, más allá de conocer el significado de forecasting, es interesante valorar su utilidad. Estas son algunas de las aplicaciones más destacadas de dichos análisis predictivos: Desarrollo de productos. Al entender cuáles van a ser las tendencias futuras, la startup se puede adelantar a la demanda de los consumidores y ofrecerles soluciones comerciales de interés desde el minuto uno. Planificación de stock. Tener más stock del necesario o sufrir una falta de inventario son problemas notables que el forecasting previene. Gestiona tu stock según las previsiones que obtengas de este estudio. Forecasting cash flows. Con el forecasting de cash flows puedes prever tus balances de liquidez en un periodo concreto de tiempo. Lo cual te permitirá controlar los momentos de escasez y anticipar las necesidades de financiación. Estrategias de marketing. El éxito del marketing depende en buena parte del conocimiento que se tiene sobre el consumidor. De ahí que, sabiendo qué es el forecasting, encontremos una técnica efectiva para realizar campañas alineadas con las preferencias de la audiencia. ¿Deberías aplicar el forecasting en tu startup? El forecasting se lleva a cabo a través de la recopilación y el análisis de datos, obteniendo así patrones que toca interpretar. Un proceso que lleva tiempo y esfuerzo; pero que trae consigo múltiples ventajas. Sin embargo, si hablamos de cash flow forecasting o de cualquier otro estudio similar, también encontramos algunos riesgos ante los que hay que estar alerta. Valoremos las dos caras de la moneda para que tomes una decisión informada sobre este tipo de prácticas predicativas. Ventajas del forecasting El forecasting presenta múltiples beneficios a las startups que lo llevan a cabo. Una serie de ventajas que te ayudarán a salir de la tan estresante incertidumbre. Aquí tienes las más importantes: Anticipación a los cambios. Es el efecto directo y el objetivo primordial del forecasting: prever los cambios en el mercado para adaptar las estrategias en pro de la competitividad. Reducción de los costes. Al planificar los recursos con más conocimiento de causa, evitarás sobrecostes por exceso o carencia tanto de stock como de personal. Mejora en la toma de decisiones. Cuantos más datos e informes tengas en tu poder, más fácil te será tomar decisiones que vayan a favor de tus intereses. El forecasting es muy útil en esta materia. Aprovechar las oportunidades. Encuentra nuevas tendencias antes que los demás y maximiza tus oportunidades ante los competidores. Mejora en la satisfacción de los clientes. Si das a los consumidores exactamente lo que quieren (antes incluso de que algunos de ellos lo sepan), generarás una mayor satisfacción y fidelización entre los clientes. Todas estas ventajas, como puedes observar, derivan en una todavía más importante: el incremento de la rentabilidad. Riesgos del forecasting Cabría pensar que no hay razón alguna para no poner en práctica el forecasting en una startup. Sin embargo, es importante actuar con cautela: también existen ciertos riesgos que hay que tener en cuenta. Pocos datos. Las startups no suelen tener datos históricos sólidos y la fiabilidad de la información puede ser engañosa. Prudencia con las suposiciones que poco o nada tienen que ver con la predicción. Un mercado cambiante. Una startup tiene una enorme volatilidad, puesto que opera en mercados emergentes donde las condiciones cambian de la noche a la mañana. Para evitar este riesgo, es importante realizar análisis de forecasting periódicamente. Falta de recursos y experiencia. La falta de recursos te puede impedir hacer un forecasting de calidad. Si esto sucede, la información obtenida no se debe interpretar al pie de la letra. En cuanto a la experiencia, muchos emprendedores suelen pecar de optimismo: mantén una actitud serena en todo momento. Factores externos. En el caso de las startups, hay muchos factores externos capaces de condicionar su futuro. Una serie de cuestiones que no se pueden prever con claridad y que requiere un forecasting más comedido. Lean Finance: CFO para startups y pymes Buena parte de los riesgos asociados al forecasting están ligados a la falta de recursos, experiencia, información y control económico. Unas condiciones comunes a la mayoría de las startups que evidencian el importante papel de los asesores especializados. Desde el equipo de Lean Finance, estamos listos para acompañarte en estas primeras fases de tu emprendimiento. De hecho, ponemos un CFO externo a tu lado, quien te ayudará a crecer a corto y largo plazo. Como expertos en dinámicas como el forecasting, sabemos obtener todas sus ventajas a medida que se mitigan los riesgos. Unos análisis que compartiremos contigo para que tengas a mano toda la información relativa a tu pasado, presente y futuro. Así pues, si quieres que tu startup fije metas viables y las alcance en tiempo y forma, nada como delegar funciones en nuestros profesionales. ¿Te gusta lo que ves? Hablemos: queremos escucharte, conocer tus ideas y llevarte a los horizontes que siempre habías soñado recorrer.

¿Qué es el Sistema Verifactu y quiénes lo deben implementar?

Sistema Verifactu

La contabilidad tiende a ser uno de los mayores quebraderos de cabeza entre las empresas. Más todavía ahora que el Reglamento Verifactu está a punto de ser obligatorio para buena parte de las organizaciones. ¿No sabes de qué se trata? ¿Tampoco si te afecta? En el área fiscal de Lean Finance ya nos hemos preparado para la llegada de este sistema y te contamos todo lo que debes saber al respecto. ¿Estás listo? ¿Qué es el Sistema Verifactu? Empecemos por el principio para explicar exactamente qué es Verifactu. Se trata de un sistema de verificación de las facturas electrónicas con el que la Agencia Tributaria pretende frenar el fraude fiscal. Así pues, con Verifactu se garantiza la veracidad de las facturas emitidas por las empresas y por los autónomos. Un sistema fiable que previene la manipulación de dichas facturas en pro de la transparencia tributaria. Es una de las novedades más importantes de la Ley Antifraude. No obstante, no se dirige estrictamente a las empresas. En su defecto, son los softwares de facturación los que deben incorporar el Sistema Verifactu de AEAT. Sin embargo, las empresas pueden elegir si enviar o no los registros de facturación a la Agencia Tributaria. En lo que respecta a los mismos registros, deben estar firmados digitalmente y disponibles siempre que la AEAT los exija. Estamos ante un paso en firme hacia la transformación digital de la gestión contable. Dicho de otro modo: otra razón más por la que pasarse a una asesoría digital. Requisitos para el cumplimiento del Reglamento Verifactu Los desarrolladores de programas de facturación, con la llegada de Verifactu de AEAT, deben firmar una declaración responsable. Con ella, afirman cumplir con los requisitos para recibir este certificado oficial de la Agencia Tributaria. Aquí tienes los aspectos más importantes, los cuales evidencian los motivos por los que este sistema es tan relevante en la gestión contable y fiscal: Inalterabilidad de los registros. A través de huellas y firmas electrónicas, el programa debe asegurar la inalterabilidad de los registros emitidos. Accesibilidad de la información. Para obtener el sello Verifactu, el software debe guardar la información en formato XML o codificación UTF-8. Esto incentiva su accesibilidad y posibilidad de recuperación. También han de tener un QR para verificar la factura. Trazabilidad. Se debe poder rastrear las facturas y, para ello, se ha de implementar una cadena de registros. Envío de la información. El sistema ha de estar preparado para enviar los datos de manera segura a la AEAT. Para ello, debe contar con protocolos de seguridad y certificados electrónicos de autenticación. En cuanto a la declaración responsable en sí, el desarrollador ha de aportar todos los datos que demuestran el cumplimiento del Reglamento Verifactu. Se incluyen el nombre y versión del sistema, la identificación del desarrollador y la garantía tanto de inalterabilidad como de trazabilidad. Ventajas del Sistema Verifactu Una vez aclarado qué es Verifactu y cuáles son sus requisitos, conviene poner en valor todas las ventajas que plantea. Como bien hemos anticipado, estamos ante una nueva apuesta por la digitalización desde la administración pública. Veamos en qué se traduce este avance: Lucha contra el fraude fiscal. El fraude fiscal es una lacra y con Verifactu, la AEAT lo tiene más fácil para detectar las malas prácticas tributarias de las empresas. Aumento de la confianza. Al integrar un programa con Verifactu en tu negocio, la confianza tanto de los clientes como de los consumidores aumentará. Automatización. En Lean Finance sabemos bien lo eficientes que son los procesos contables y fiscales digitales. Con el Reglamento Verifactu, estas tareas se resolverán con más rapidez si cabe. Ahorro de tiempo y dinero. A mayor eficiencia, menores pérdidas de tiempo en la gestión fiscal y contable. Lo cual, además, también repercute favorablemente en los gastos corporativos. Cumplimiento normativo. Los errores contables y fiscales salen caros. Las consecuencias de saltarse la ley no se eximen por el desconocimiento o los errores. Ahora, con Verifactu, se garantiza el cumplimiento normativo para reducir las multas. ¿Quiénes deben cumplir con el Reglamento Verifactu? En este punto, es importante insistir en una cuestión fundamental: ninguna empresa está obligada a integrar el Sistema Verifactu en su negocio. Quienes sí deben hacerlo son los desarrolladores de softwares de facturación electrónica. Dicho esto, te animamos fervientemente a dar el salto al nuevo sistema de verificación de la Agencia Tributaria. Los beneficios, como habrás podido observar, no son pocos y el margen de error ante la AEAT se reducirá al mínimo. No asumas riesgos innecesarios y remite las facturas con esta tecnología. Eso sí: lo hagas o no, el programa utilizado sí debe estar homologado. Por otro lado, debes tener en cuenta cuándo entra en vigor Verifactu. Tras la aprobación del Real Decreto 1007/2023, de 5 de diciembre, la normativa entró en fase de preparación a la espera de la orden ministerial. Ahora bien, los programas de facturación electrónica deberán cumplir con el Reglamento Verifactu antes del 1 de julio de 2025. Muchos ya lo hacen y en Lean Finance te ayudamos a sacar a flote todo su potencial. Disfrutando como es debido de las ventajas que trae consigo la digitalización de la contabilidad y la gestión fiscal. Te ayudamos con la gestión fiscal y contable de tu empresa Dado que prestamos un servicio de asesoría fiscal, contable y laboral digitalizada, en Lean Finance estamos acostumbrados a los trámites virtuales. Por lo que el Reglamento Verifactu no nos pilla por sorpresa. Todo lo contrario: estamos acostumbrados a llevar la gestión fiscal y contable de nuestros clientes con programas que ya se han adaptado al sistema de AEAT. Si confías en nuestro equipo, estaremos siempre a tu lado. Seremos una extensión más de tu negocio, trabajando en tiempo real para sacar el máximo partido a las nuevas prestaciones telemáticas. La facturación electrónica ya es una realidad y Verifactu está a punto de aterrizar en España. No te quedes atrás y da el salto a una nueva manera de entender las gestiones de tu negocio. Habla con nosotros y