Día tras día, escuchamos y vemos noticias en prensa donde se habla de la poca probabilidad de supervivencia de las pymes en el mercado actual. Lo primero que pensamos es que no han sabido adaptarse a las necesidades del mercado, que ha fallado la captación de clientes, la organización o que los socios no han sabido remar en la misma dirección. Por ningún lado aparece el concepto de CFO externo para pymes.
Casi nunca se habla de aspectos financieros. Siendo esta una de las áreas que más influyen en la capacidad de supervivencia de una pyme.
Si no quieres ser una de esas empresas que mencionan en prensa, ponte en manos de un CFO externo para pymes.
A continuación, comentaremos qué puede hacer por tu negocio y por qué es tan importante contar con sus conocimientos y experiencia.
¡Empecemos!
Cuál es el papel que desempeña un CFO externo en pymes
Como decíamos, el área financiera es una de las más importantes dentro de una empresa y de las que requiere especial atención y cuidado.
Sin embargo, muchas veces no se cuenta con personal cualificado para asumir estas responsabilidades.
Es más, hasta que una pyme no llega a un volumen de facturación superior a los 5 millones de euros, es extraño que sea necesario contratar a un CFO a tiempo completo e interno. Por ello, se recomienda contratar a un CFO externo para pymes.
Su principal función es garantizar un crecimiento estable del negocio. El papel que ocupa es muy claro: el CFO tiene que analizar la rentabilidad de los proyectos, de los equipos y de las inversiones, de manera que el crecimiento sea estable y solvente, sin poner en juego la supervivencia de la empresa.
Por eso, lejos de lo que se pueda llegar a pensar, el principal motor de un negocio no siempre son sus clientes. Si hay clientes, pero los recursos que se generan no están bien gestionados, toda la compañía cae.
Una buena gestión económica siempre va a favorecer la implementación de estrategias de captación y fidelización de clientes.
Por qué es tan importante para las pymes
Veamos ahora de forma más detallada cuáles son las ventajas o beneficios de tener un CFO externo dentro de una pyme.
Te adelantamos que, si quieres que tu empresa crezca y llegue a convertirse en un referente dentro de tu sector, vas a necesitar contratar a uno.
Sin una buena base financiera, no es posible construir unos cimientos estables y rígidos que soporten el peso del negocio. Y, a veces, cuando te das cuenta de la falta que te hace ese control financiero, ya es tarde.
Dicho esto, estas son sus ventajas:
Información financiera precisa y fiable
Sin una información clara, la empresa no podrá crecer ni sobrevivir.
Lo ideal es conocer de primera mano cualquier detalle económico financiero de la misma. Principalmente, los ingresos y gastos. Así te aseguras de hacer un uso correcto de todos los recursos disponibles.
En caso contrario, podría darse la situación de que la empresa gaste más dinero del que entra. O que se estén desaprovechando materiales, tiempo o dinero en asuntos innecesarios. Al final, si los datos no son fiables, las decisiones van a estar apoyadas en información poco rigurosa.
La optimización del gasto también es un aspecto a trabajar por el CFO externo. Este debe garantizar que no se gasta dinero de más y que se maximizan los beneficios.
Anticipación
Cuando se tiene información fiable y a tiempo, es posible prevenir incidentes importantes.
Por ejemplo, cuando sabemos que dentro de unos meses vamos a firmar unos cuantos contratos importantes que no estaban planeados, el deber de un CFO externo es anticipar ese movimiento y tener preparadas las modificaciones en las proyecciones financieras que nos permitan aprovechar esos recursos de una manera coherente.
Del mismo modo, si el análisis económico financiero de la compañía predice que dentro de unos meses es posible entrar en pérdidas, es necesario tomar las medidas oportunas para prevenir dicha situación y buscar el éxito de la empresa.
Normalmente el CFO de una pyme hace previsiones para informar a los socios de posibles inconvenientes y sugiere propuestas que les ayuden a mejorar.
Pleno conocimiento de la realidad
Gracias al buen hacer de un CFO externo para pymes, todos los socios pueden saber a tiempo real cuál es el estado de las finanzas de la misma.
Y, al hilo del punto anterior, tomar medidas que se acerquen a los objetivos que desean alcanzar.
De otro modo, sería ir a ciegas y desalineados con la realidad del negocio. Antes de realizar una inversión importante o dar un paso relevante para la empresa, lo ideal es consultarlo con el CFO para no comprometer la estabilidad de la misma.
Plan financiero a medida
El plan financiero de una pyme se podría decir que es el documento que contiene el camino a seguir para lograr las metas que esta se proponga.
Como tal, debe ser totalmente personalizado. Pues cada empresa tiene un punto de partida, unas metas y unos recursos para alcanzarlas diferentes.
Es responsabilidad del CFO externo preparar este plan y diseñar la mejor ruta posible para lograr la rentabilidad.
Control, análisis y seguimiento
Otro de los beneficios más notables de contar con una CFO externo es que tendrás a tu disposición un personal altamente cualificado llevando a cabo un riguroso control, análisis y seguimiento del estado económico financiero.
Este incluye aspectos como el análisis de balances o la gestión de la tesorería.
Lo importante es que alguien experto se ocupe de estos temas, sin que tú tengas que preocuparte por ellos.
De este modo, podrás dedicar tu tiempo a actividades de desarrollo y crecimiento alineadas con tu zona de genialidad. Y donde seguro eres más productivo.
Buena política de inversión
A veces, lo que a simple vista puede parecer una buena oportunidad de inversión, no lo es. Y por ello, es conveniente llevar a cabo un trabajo de inspección para comprobar si puede ocasionar beneficio o perjuicio para la empresa.
El CFO externo es quien tiene las herramientas adecuadas para dar una respuesta acertada.
Por ello, no es aconsejable tomar una decisión apresurada y sin contar con el asesoramiento de expertos.
Mejor toma de decisiones
Por último, todo lo anterior se podría resumir en una única razón de peso. Y es que contratar a un CFO externo, al fin y al cabo, te ayudará a tomar mejores decisiones para tu negocio.
Con toda la información necesaria y el asesoramiento de un experto altamente cualificado en aspectos financieros, es posible aumentar la probabilidad de acierto en las decisiones. Y sobre todo, disminuir el riesgo de fracaso. Con esto, podemos asegurar un crecimiento sostenido y estable de la facturación sin comprometer los beneficios, y eliminar esa sensación de pérdida de control sobre tu compañía.
Si tienes una pyme y quieres dar pasos seguros, te recomendamos caminar acompañado de un CFO externo.
Su experiencia y conocimientos te ayudarán a seguir la dirección correcta hacia el lugar donde quieres llegar.
En Lean Finance tenemos una amplia trayectoria ocupando este rol en organizaciones de todo el país.
Si quieres que te informemos sobre nuestros servicios, escríbenos.
Nos encantará conocerte, descubrir tu proyecto, entender vuestra razón de ser y sobre todo ser partícipes del éxito que seguro está próximo a producirse.
Estamos convencidos de que juntos muy pronto formarás parte de nuestros casos de éxito.